"Esta semana santa sin dudas fue muy distinta a las ya vividas, con un sentimiento fuerte de estar en comunión conmigo misma y con los demás… con Dios.
Fue una oportunidad para tener la certeza y la dicha de saber que en mi caminar estoy acompañada, saberme escuchada y estar con el oído atento y dispuesto para el otro.
Darme cuenta que en esos silencios que a veces me cuesta hacer y sentir por lo cotidiano, por la rutina, por tantos ruidos, están llenos de fe, paz y vida de Dios, solo hace falta detenernos un poco y aceptar la invitación para volvernos a redescubrir.
Semana santa online, que lindo haberla vivido porque es ahí donde te das cuenta como Jesús se la sigue jugando en todas, para decirte “Estoy acá, camino a tu lado, te ayudo a llevar tu cruz”.
Compartir en comunidad con jóvenes y sacerdote fue gratificante porque es ahí donde me encontré y encontré en el otro a Jesús. Cada una de sus historias un testimonio vivo de su amor; que aún estando lejos físicamente y por una pantalla, el corazón y el abrazo dispuestos para acortar esa distancia.
Fue lindo indagar en mi propia historia nuevamente, aceptarla, aceptar mi camino recorrido con todo lo que conlleva, miedos, inseguridades, errores…
Saber que a veces llevamos dentro nuestro algún dolor por algo que hayamos vivido pero que Jesús a través del otro nos va ayudando a transformarlo en oportunidades; porque el amor todo lo puede.
Una frase que resume un poco lo vivido y que la tendré presente, “Voy a medias con vos”. Surge el deseo de seguir caminando junto al otro y dejándose acompañar porque es allí donde está Dios.
Me despido con un corazón agradecido, con un corazón donde guardaré a cada persona que me acompañó, sabiendo que no hay distancias, ni “encierros” que nos separen, siempre y cuando estemos dispuestos a tener el corazón abierto y la escucha atenta para dejar que Jesús siga obrando en nosotros y ser instrumentos para acompañar e ir a medias con los demás.
Un abrazo, Laura."
Laura Comini - Comunidad Salesiana de Salto
Participó de la misión - retiro online de Semana Santa del MJS de Villa Colón
"Esta semana santa en particular, fue muy especial para mí. En tiempos de cuarentena, la resignación de tener que “amigarme” a los encuentros virtuales se transformó en amor, que buscaba maneras de acercarse por esos medios. Me tocaba vivir por primera vez un retiro virtual, tenía que buscarle la vuelta a todo eso tan nuevo, de celebrar la Pascua a través de una pantalla.
En el retiro me tocó acompañar a un grupo. Lo esperado eran consignas, mensajes, textos, preguntas, una compartida. En paralelo, estaba abrumada. Estaba ahí, con la cabeza sobre la almohada buscando significados: ¿Cómo ver a Jesús en todo lo que estaba viviendo? La ansiedad arranca a jugar una mala pasada, pero las cosas no funcionan a la fuerza, menos con Él.
Lo esperado, no fue. Jesús siempre es muy creativo cambiando los finales de los cuentos. Ahí me encontré yo, conectando a través de una cámara con historias, historias vivas que se mezclaron con la mía. Los mensajes, las videollamadas, eran abrazos que aún a distancias largas me hacían sentir acompañada. Ellos necesitaban de mí, yo también de ellos. Perdí el control y me olvidé de pautas, nos encontramos sosteniendo una cuerda en círculo, que no sería lo mismo si uno la soltaba.
En ese momento frené. Mi encuentro con Jesús fue muy distinto a todos los que ya experimenté. Ahí lo ví a Él, ya no en mí, ni en ellos, sino en nosotros y en ese lazo inquebrantable que habíamos creado aún a la distancia. Quizás era eso, lo que él estaba queriendo despertar en mí todo ese tiempo: No puedo sola, mi búsqueda también es con otros. Que este tiempo de cuarentena y distanciamiento no nos “pegue” para encerrarnos en nosotros mismos, por lo contrario, salgamos al encuentro y seamos transformados por él."
Valentina Gularte - Comunidad Salesiana de Rivera
Participó del retiro virtual del MJS de Rivera