Las “charlas de bautismo” o catequesis prebautismal tienen como objetivo preparar a padres y padrinos para celebrar el sacramento y acompañar a sus hijos y ahijados.
En nuestra realidad es muy habitual encontrarnos con una formación sacramental muy débil o con ideas equivocadas. Por eso es tan importante que las familias que desean bautizar a sus hijos participen con asiduidad en estos encuentros, que pueden ser el inicio de su integración a la comunidad.
La preparación consiste en:
Lo que no se puede esperar de estas charlas:
Lo que se debe evitar en la charla:
Ideas y sugerencias de http://www.quintanillah.com/2013/09/4-catequesis-prebautismales/
Objetivo: acercarnos al sacramento del bautismo a través de sus signos y efectos, y vincularlo con Jesús y la Iglesia.
Como se decía al principio, el encuentro inicial comienza con la presentación de los niños que serán bautizados, los padres, padrinos y catequistas.
1) La pregunta de partida a los padres y padrinos será: ¿QUÉ ES LO QUE MÁS DESEAN PARA SUS HIJOS?
2) Después que se comparte la anterior pregunta, se plantea la siguiente: ¿POR QUÉ Y PARA QUÉ TRAEN A LOS ÑIÑOS A BAUTIZAR?
A medida que van contestando, se pueden recoger las respuestas en un papelógrafo. Los catequistas irán afinando la respuesta según estos ítems:
El bautismo es un sacramento, un signo del amor de Dios, a través del cual acompaña en distintos momentos de la vida
Dios Padre nos creó por amor, nos ama como hijos suyos y quiere que seamos felices. Dios Padre envió a Jesús al mundo para mostrar al ser humano cómo quiere que seamos: Jesús es nuestro modelo de vida, es nuestro modelo de relacionarnos con Dios, con el mundo y con los demás. El bautismo nos hace como Jesús, nos da la gracia, la fuerza de Dios para vivir como Jesús; por eso por el bautismo somos hijos de Dios. A todo esto también le podemos llamar salvación: vivir libres del pecado y según el plan de Dios.
3) Después de conversar y presentar el bautismo como el sacramento que nos permite vivir como hijos de Dios, pasaremos a conversar de los signos del bautismo.
Como signo concreto y eficaz del amor de Dios, el sacramento del bautismo se vale de otros signos sencillos y cotidianos.
Dicho esto, se entregará a cada grupo de padres y padrinos dos o tres imágenes impresas con los distintos signos del bautismo: agua, aceite, luz. Con ellas se preguntará qué nos representan cada símbolo de estos. P. ej.: la luz nos libra del miedo, nos hace sentir alegres, etc.
4) Compartiremos las respuestas de los padres y padrinos, y al mismo tiempo iremos presentando estos signos en función del bautismo.
Es el signo principal del bautismo (el único imprescindible). El agua es fuente de vida, que fecunda, regenera, purifica. El agua del bautismo simboliza la vida de Dios. Ser bautizado significa ser sumergido en Cristo, y participar, ya desde ahora, de su vida. Además, como símbolo de pureza, el agua nos hace vivir la liberación del pecado.
El celebrante vierte tres veces agua sobre la cabeza de la persona que es presentada o pide el bautismo. Al mismo tiempo el celebrante dice: «Yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo». Este gesto y estas palabras son el núcleo central, el corazón del sacramento.
En la antigüedad eran ungidos con aceite los reyes, profetas y sacerdotes. Así el bautizado es rey (reinar quiere decir amar, servir), profeta (ser testimonio de Dios entre el pueblo cristiano) y sacerdote (presenta a Dios toda su vida). Además, el aceite simboliza la fuerza, la suavidad y la belleza del Espíritu que impregnará al nuevo cristiano.
El cirio, encendido en el cirio pascual, que es portado por los adultos, recuerda la noche pascual y todo el misterio de Cristo, que muerto y resucitado es luz para nuestras vidas. Una luz que ha de brillar en nuestra sociedad.
5) Luego de esto se propondrá una breve celebración.
Cada familia escribirá un papel el nombre de su hijo. Se dispondrá un lugar preparado en el centro de la asamblea (una cruz, la Biblia, agua, una vela encendida y varias velitas apagadas) donde cada familia acercará el nombre de su hijo, lo dirá en voz alta y encenderá una velita. Cuando todos lo hayan hecho, se rezará el Padrenuestro todos juntos.
Finalmente, se convocará para el próximo encuentro.
(DESCARGAR AQUÍ ficha para entregar con un resumen de esto)
Objetivo: conocer el rito del bautismo y prepararse para celebrarlo.
1) Al principio se recibirá a las familias, se volverán a presentar los catequistas y las familias.
2) Se «repasarán» algunas de las ideas del encuentro pasado. Este encuentro se concentrará en explicar el rito del bautismo para que cada familia lo pueda celebrar con tranquilidad.
3) Se puede comenzar haciendo un paralelismo de la celebración de un sacramento con una fiesta «civil» (un cumpleaños, p. ej.): la bienvenida, lo que hay que llevar, lo que hacemos en la fiesta y cómo la terminamos (en el cumpleaños siempre hay una recepción, llevamos un regalo, cantamos y cortamos la torta, etc; hay un rito para esta fiesta).
4) Una vez explicada la celebración y las distintas intervenciones de cada persona, que incluso puede ser representadas, se da un tiempo para preguntas y comentarios de los padres y padrinos.
DESCARGAR EL RITUAL PARA EL BAUTISMO DE NIÑOS