Testigos de la Pascua
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abril 15, 2020
El Via Lucis, "camino de la luz" es una devoción reciente que puede complementar la del Via Crucis. En ella se recorren catorce estaciones con Cristo triunfante desde la Resurrección a Pentecostés, siguiendo los relatos evangélicos.
La Pascua es la gran ocasión para hacer el repaso de la infinita serie de alegrías que apenas disfrutamos. El tiempo de descubrir que:
Vida
Somos dichosos porque fuimos llamados a la vida, porque entre la infinita multitud de seres posibles fuimos elegidos nosotros, amados antes de nacer, escogidos para este milagro de vivir.
Fe
Somos dichosos porque fuimos llamados a la fe, recibimos esta gracia, sin mérito alguno. Pudimos nacer en una familia de paganos o de increyentes, y ya desde el bautismo nos pusieron una señal en la frente que nos reconocía como elegidos y llamados al Evangelio.
Amados
Somos dichosos porque Dios nos amó primero, porque él no esperó a saber si mereceríamos su amor y quiso empezar a amarnos antes de nuestro nacimiento.
Amamos
Somos dichosos porque también nosotros le amamos, bien o mal, mediocre o aburridamente, le amamos y es eso lo que engrandece y da sentido a nuestras almas.
Padre
Somos felices porque tenemos un Dios mucho mejor del que nos imaginábamos. Como nosotros somos tacaños en amar, creíamos que también él era tacaño. Como nosotros amamos siempre con condiciones, pensábamos que también él regatearía.
Humanidad
Somos felices porque Cristo quiso seguir siendo hombre después de su resurrección. El pudo, efectivamente, vivir transitoriamente su condición de hombre, llevar la humanidad como un vestido y regresar a su exclusiva gloria de Dios cumplida su redención, pero quiso resucitar y permanecer siendo hombre además de Dios.